De pronto te ves corriendo tras un apresurado Conejo Blanco vestido de frac. Luego, tu cuerpo se achica y se agranda y apareces marchando al lado de un ejército de barajas que usa ropa y zapatos, y te sale al encuentro un Gato que cuando desaparece deja como rastro sólo su sonrisa. Si todo esto ocurre, no vayas a pensar que a tu cabeza le falta un tornillo. Lo que pasa es que estás leyendo Alicia en el país de las maravillas, donde además de todos estos personajes, platicarás con una Tortuga Falsa que estudia Fistoria, Mareografía y Bidujo…¡qué de cosas fantásticas guardas este libro!, ¿no crees?