Apasionada e impetuosa, la personalidad de Tina fue única. Nacida en Italia a finales del siglo XIX, y tras un breve paso por Hollywood, donde trabajó como actriz, llegó a México en plena efervescencia cultural de los años veinte. Fue compañera en las reflexiones artisticas y políticas de los intelectuales y creadores de la epoca Edward Weston, Diego Rivera, David Alfaro Siqueiros o Frida Kahlo, solo por citar algunos y aca encontraría el coraje y la inspiración necesarios para descubrir en la fotografía el medio idoneo con el que mostrar su indignacion y compromiso por las injusticias sociale s. Pero más fuertes que su caracter e incluso su obra fueron sus fervientes ideales anti-fascistas, que mantuvo firmes hasta su trágica muerte, cuya causa real sigue siendo un misterio.