Aziel es un genio, un fantasma, un espíritu encadenado al mal que sólo conserva retazos de memoria y que no comprende qué clase de fuerzas lo dominan, aunque lucha contra ellas para alcanzarla redención. Un día, de repente, aparece en Nueva York justo para presencias el cruel asesinato de una mujer joven, la hija de un conocido telepredicador y líder de una secta. Aziel no comprende cómo ha llegado a estos tiempos ni de dónde procede; sólo sabe con certeza que debe vengar ese crimen. Sus sentimientos son tan confusos como sus recuerdos, pero ahora, encarnado en un tiempo y un espacio que no son los suyos, tiene la oportunidad de desentrañar el misterio de su propia existencia. O al menos de intentarlo. La búsqueda de esta respuesta sume al lector en la historia de los judíos de la antigua Babilonia y lo arrastran, a través de los tiempos, hasta la actualidad.
