Los poetas, como los niños, saben que muchas de las primeras palabras son eco de las canciones de cuna cantadas por las madres, sin duda que esas palabras son las semillas del canto, es decir de la poesía. Este libro es un coro de voces femeninas que visitan sus días de infancia, cantan a sus hijos o miran con atención a los animales.