¡Tengo el récord de hacer preguntas raras! Por suerte mi papá es científico y me las contesta casi todas. Un día le pedí que me explicara por qué se me arrugan los dedos al bañarme. Después le fui haciendo preguntas más difíciles, como: ¿Se tiraban pedos los dinosaurios? ¿¡Qué hago para que se me pase el hipo!? ¿Por qué la gente tiene distinto color de piel? Y por supuesto, ¿¡qué son los mocos!? Lo mejor es que sus respuestas son como un cuento. Y que cuando conversamos lo pasamos en grande.