El Popol Vuh es, sin duda, el libro indígena más importante de América. Desde luego es el libro más coherente, más hondo que ha producido el mundo prehispánico. Bien a bien es un libro religioso y al mismo tiempo, religioso. Ambos temas, como es natural, van sumergidos en un clima legendario, que hace casi imposible deslindar los valores reales de los puramente imaginados.
No se piense que es sólo un libro arcaico, hundido en los siglos viejos, convertido ya en una especie de pieza arqueológica de interés para curiosos o iniciados en la ciencia de la antigüedad. Es también un libro moderno, contemporáneo porque sus leyendas aún las repiten los indios del mundo maya, en la amplia zona de su dominio actual que abarca el sureste de México y el norte de Guatemala, y se limita a las costas de Caribe.
En la versión que aquí se reproduce se corrigen los errores que ya indicaron tanto el P. Ximénez como el abate Brasseur; es decir, se estructura el orden de las leyendas (que sólo son dos: Los Abuelos y Los Magos) con lo cual gana la comprensión del libro y se moderniza tanto la sintaxis como la ortografía, lo que hace más fácil, más dúctil la lectura. Tiene pues el lector un Popol Vuh vivo y no un Popol Vhu hermético propio para la inteligencia de los eruditos.