Seguramente, por causa del destino o de la mala suerte, caíste en alguna conversación de adultos sobre "cosas importantes" y después te sentiste excluido o perdiste el hilo de la plática por no saber el significado de muchas palabras -y, además, porque era aburridísimo estar ahí-. Si te ha pasado más de una vez, no dejes ni por un momento Palabrotas, palabrejas y otros blablablás, ya que puede sacarte de un apuro y lo mejor: no se parece ni tantito a una pesada enciclopedia. ¿No entiendes ni pío qué intenta decir un chichicuilote y mucho menos lo que dice tu abuelita?