La aventura literaria deviene pronto en un medio para escapar de la angustia cotidiana de esta distopía caribeña. Un primer crimen fortuito las convierte en cómplices y la lectura de un libro de autoayuda, en asesinas. La inquietante pregunta que recorre estas páginas de manera implícita es que toda mujer, en nuestras sociedades impunes y machistas, esconde un deseo latente de venganza; toda mujer tiene un crimen pendiente. La novela también discute el valor terapéutico de la literatura, las múltiples formas del deseo y el fraude moral de los libros de “desarrollo personal”. Con una sensibilidad única para entender el universo femenino, sus gestos íntimos y sus deseos más oscuros, con el trepidante ritmo de un thriller y con la profundidad analítica de un testigo alerta de nuestros días, Mujeres que matan es la confirmación del venezolano Alberto Barrera Tyszka como uno de los grandes narradores de nuestra lengua.