Un guerrero de la luz conserva el brillo en los ojos. No siempre es valiente y en ocasiones sufre por cosas inútiles y duda de sí mismo. Sin embargo, por eso precisamente es un guerrero de la luz. Porque se equivoca. Porque acepta las derrotas. Porque se cuestiona a sí mismo. Porque alimenta la esperanza en medio del cansancio y el desaliento. Porque busca una razón y no se detiene hasta encontrarla. Manual del guerrero de la luz concentra toda la filosofía de Paulo Coelho.