¡El adorable Cuasimodo no podía faltar en nuestra colección de Clásicos infantiles! El jorobado de Notre Dame, a pesar de tener un evidente defecto físico, tiene alma de héroe y es capaz de los más nobles sentimientos. Acompáñalo a admirar la espectacular ciudad de París desde las alturas de los campanarios y encuentra en la profundidad de sus ojos, la verdadera belleza, que es la que Víctor Hugo quiso enseñarnos al escribir esta historia.