Asumo que Ruíz Massieu alertaría sobre el escenario complejo de las elecciones del 2018. Disputas antipartidistas, alianzas de partidos y candidaturas ciudadanas, provocan una expectativa que pudiese poner mayor distancia al ciudadano del ejercicio del voto. El clima político que vivimos no parece propicio para represtigiar a políticos y partidos.
Los partidos políticos son indispensables para la consecución y articulación del poder. Como lo advirtió Ruíz Massieu, su intermediación, hasta ahora, no tiene reemplazo. En la democracia no se puede prescindir de ellos. Con todos sus defectos los partidos identifican, articulan, debaten, orientan y proponen programas. Hay que modernizar los partidos, no destruirlo. Pretender la vuelta al ágora: utopía de costosas consecuencias.