Acabado en 1967, El sol y el acero es un texto en el que encontramos la expresión de muchas de las contradictorias y sutiles líneas de fuerza que configuran el complejo y singular pensamiento del escritor Yukio Mishima, o cuando menos del personaje que quiso llegar a ser. El culto del cuerpo como trasunto y complemento del culto del espíritu, la dolorosa contradicción entre palabra y acción, la delgada, casi imperceptible frontera entre vida y muerte -realidades opuestas pero que a la vez se funden y complementan-, son sólo algunos de los motivos que articulan este texto tan fulgurante como controvertido.