Héroe, traidor, asesino, hereje, mártir, loco, noble salvaje, agente del imperialismo yanqui, defensor de los derechos de los mestizos y de los indios, padre de la provincia de Manitoba e, incluso, uno de los fundadores de la Confederación Canadiense. La Historia quiso que epítetos tan diversos y discordantes correspondan a un mismo individuo: Louis Riel. La vida y muerte de este personaje se han convertido en mitos fundacionales de Canadá. Louis Riel fue líder del pueblo mtis etnia mestiza, de ascendencia indígena y europea que encabezó dos movimientos de resistencia contra el gobierno canadiense. El primero (1869-1870) dio como resultado la creación de la provincia de Manitoba, y el segundo (1885) derivó en un enfrentamiento militar, la única guerra que ha tenido lugar hasta la fecha en suelo canadiense. Este conflicto, alentado por sir John Macdonald, primer ministro de Canadá, además de costarle la vida a Louis Riel, les valió a los indios su encierro en las reservas por más de sesenta años y cuyas consecuencias vemos hasta ahora. Sobre ninguna otra figura de la historia de Canadá se ha escrito tanto como sobre Louis Riel, sin embargo, ésta es la primera biógrafa en español. Resultado de una labor de investigación de cincuenta años, El profeta del Nuevo Mundo nos revela la vid a de un hombre que quiso hacer de Canadá un espacio de comunión para las naciones.