Morir es parte fundamental de nuestra existencia, es la meta del ciclo de la vida y, hasta ahora, nadie ha eludido la cita. Sin embargo, la tradición budista nos ofrece un mejor panorama que sólo dejar de existir cuando esto sucede, ya que puede preparar, a quién así lo quiera, a transitar por el periodo Bardo entre la muerte y la reencarnación, para de esta forma, alcanzar la iluminación que perdurará hasta la futura existencia. Este es el tema central de El libro tibetano de los muertos, que gracias a sus instrucciones tenemos una esperanza fehaciente de que la vida que estamos gozando actualmente es un episodio más en la historia que tenemos con el universo y que a través de sus enseñanzas podremos estar en gracia con el todo y ser mejores en la próxima reencarnación.