Mafalda se hace muchas preguntas, demasiadas preguntas que a menudo irritan y superan a los que la rodean. Nuestra pequeña indignada se cuestiona los temas universales y comparte sus reflexiones sobre el mundo. Mafalda se plantea constantemente cómo va el planeta, y es que si uno se detiene a observar cómo tratamos la Tierra se da cuenta de que hay motivos para preocuparse. Debiera haber un día a la semana en que los informativos nos engañaran un poco dando buenas noticias.