Bartleby, el escribiente es una de las narraciones más célebres de la literatura universal, considerada como una obra precursora del existencialismo y de la literatura del absurdo. Narra la historia de un oficinista fantasma viviendo bajo un sonambulismo, al margen de su empleo. No es un empleado alegre aunque le guste lo que hace, escribe silenciosas, mecánicamente y encerrado en una especie de ermita, ajeno a lo que no es su tarea. Es un hombre aplicado, sin vicios, laborioso incesante y de ecuánime conducta, honesto y cumplido, pero con una soledad inmensa y una pasividad exasperante.