El Alfabeto de Rabí Akiva, un texto singular y poco conocido por parte del gran público, contiene materiales que participan de las dos grandes corrientes de la literatura cabalística: la Obra de la Creación y la Obra del Carruaje. Presentado bajo la forma de un midrash agádico tradicional, es decir, una compilación rabínica que contiene homilías, agadot o historias ejemplarizantes y pasajes de exágesis bíblica, la obra se encuadra en los llamados midrashim especulativos o místicos, dado que, lejos de ofrecernos una explicación directa y simple sobre los pasajes bíblicos en cuestión, el autor pretende ahondar en el detalle místico, descubrir qué oculto secreto se halla enterrado entre las palabras, entre las propias letras de la Biblia hebrea.